El cártel en la Escuela
El cártel constituye, junto con el pase, uno de los dos pilares de la Escuela Una. Un “órgano de base”,1 es “congruente”, desde el principio, “con el concepto de escuela”.2 En su “Acto de fundación” (1964), Jacques Lacan define el “principio” del cártel –“una elaboración sostenida en un pequeño grupo”– como el medio “para la ejecución del trabajo” de la Escuela.3 Jacques-Alain Miller nos recuerda, enfatizando el artículo definido, que no es simplemente un medio, sino más bien el medio de tal trabajo, explícitamente privilegiado por Lacan con respecto a cursos, conferencias, jornadas y seminarios.4
Lacan aísla en el “Acto de fundación” los elementos constituyentes del cártel. Conviene recordarlos en su rigurosidad, remitiéndonos también a otros textos cruciales.
El Más Uno, “si bien es cualquiera, debe ser alguien”,5 aunque no necesariamente miembro de la Escuela. Se elige por los miembros del cártel: tres, cinco o incluso más, pero idealmente cuatro. A su función será adscrito la “selección”, “discusión” y “destino”6 del trabajo llevado a cabo. Pero el Más Uno no se salva de ello, “tiene que trabajar él mismo.” No como amo, sabio o analista del grupo, sino como “agente provocador”. El Más Uno también tiene que ser un Menos Uno, operar sobre sí mismo una “ascesis”, “tomar a su cargo la división subjetiva” del grupo.7 En vez de saturarse con un supuesto carisma, tiene que trabajar como “líder funcional”, “modesto”, “pobre”, “de un grupo mínimo”.8 De hecho, Lacan se inspiró, para pensar la lógica del cártel, en los pequeños grupos de la psiquiatría inglesa durante la segunda guerra mundial, o en los grupos formados en los albores del Mayo ’68 francés. El cártel, en suma, lleva las marcas de los traumas y disrupciones del siglo XX, y las traslada al siglo XXI.
Los miembros del cártel (y por lo menos uno de ellos sí debe ser miembro de la Escuela) no entran en su funcionamiento como sujetos divididos con sus “faltas-en-ser”, tampoco como sabios o sujetos-supuesto-saber. En lugar de esto, su ensamblaje llega a componer un “enjambre” de S1s puestos al trabajo. Un cártel se encuentra bien fundado cuando “cada cual tiene razones para estar allí”, “en calidad de…”, con sus “insignias” concretas y bien definidas. El “equipo” del cártel se forma por el hecho de que cada uno de sus miembros tiene su propio “rasgo” determinante (y es el Más Uno, por supuesto, quien vela por la emergencia de estos rasgos). Precisamente porque “la única instancia a trabajar para producir un saber son elementos estrictamente identificados”.9 Cada miembro del cártel tiene que encontrar, inventar, su nombre de cártel.
El trabajo en el cártel, como cualquier trabajo realizado en el marco de la Escuela, no debería estar orientado por la transferencia, sino, y de forma inversa, esta transferencia debería estar orientada por el trabajo mismo. Al mismo tiempo, si es posible esperar que este trabajo sea decidido, solamente puede ser “suscitado por una llamada”10 (la llamada del Más Uno). El trabajo no se realiza solo. Sin embargo, si la elaboración del trabajo en el cártel tiene su parte colectiva, el producto de este trabajo debe ser “propio de cada uno”,11 y separado de los posibles efectos de la colectivización.
Los productos de cada uno de los miembros del cártel (el Más Uno incluido) son, enfáticamente, productos de saber: “el cártel no me ha interesado nunca más que con propósitos de saber”.12 Este saber pasa por su exposición y escritura. La existencia de los productos no es necesaria, sino posible o incluso contingente. Depende del cumplimiento de sus condiciones en el marco del cártel. Más allá de la denuncia de los significantes amos, “la lógica indica que no hay producción de saber más que si el trabajador no está estorbado por el efecto subjetivo”.13 Hay producto cuando los “resultados” del cártel prevalecen sobre sus “crisis”,14 cuando los miembros del cártel no se dedican a “hacer el tonto” con la “asociación libre”.15
Para escapar al “pegoteo”,16 al “efecto de grupo” que Lacan consistentemente denunció, los cárteles están sujetos a la permutación, a un movimiento de “remolino” (tienen una duración de un año, o máximo dos). “Vayan”, Lacan nos incita en nuestro trabajo en cárteles, “júntense varios, péguense unos a otros el tiempo que haga falta para hacer algo y disuélvanse después para hacer otra cosa.”.17
Claramente, y para volver al principio, el cártel es un arma política de la Escuela Una. Instala, en el lugar de un posible “caudillismo”, una “organización circular”.18 Promueve el entusiasmo en contra de cualquier respeto de las formas. “El pro-cártel es anti-autoritario”,19 porque su buen funcionamiento pone a cielo abierto el hecho de que “la jerarquía no se sostiene sino por administrar el sentido”20, aserción a verificar en el funcionamiento de cada cártel.
1 Lacan, J. “Decolaje o despegue de la Escuela”: https://www.wapol.org/es/las_escuelas/TemplateArticulo.asp?intTipoPagina=4&intEdicion=1&intIdiomaPublicacion=1&intArticulo=159&intIdiomaArticulo=1&intPublicacion=10
2 Miller, J.-A. “El cártel en el mundo”: https://www.wapol.org/es/las_escuelas/TemplateImpresion.asp?intPublicacion=10&intEdicion=3&intIdiomaPublicacion=1&intArticulo=293&intIdiomaArticulo=1
3 Lacan, J. “Acto de fundación”. Otros escritos. Buenos Aires, Paidós, 2012, p. 247.
4 Miller, J.-A. “El cártel en el mundo”.
5 Lacan, J. “Decolaje o despegue de la Escuela”.
6 Lacan, J. “Acto de fundación”, p. 248.
7 Miller, J.-A. “Cinco variaciones sobre el tema de “La elaboración provocada”: https://www.wapol.org/fr/las_escuelas/TemplateArticulo.asp?intTipoPagina=4&intPublicacion=10&intEdicion=3&intIdiomaPublicacion=5&intArticulo=295&intIdiomaArticulo=1
8 Miller, J.-A. “El cártel en el mundo”.
9 Miller, J.-A. “Cinco variaciones sobre el tema de “La elaboración provocada”.
10 Miller, J.-A. “Cinco variaciones sobre el tema de “La elaboración provocada”.
11 Lacan, J. “Decolaje o despegue de la Escuela”.
12 Miller, J.-A. “Cinco variaciones sobre el tema de “La elaboración provocada”.
14 Lacan, J. “Decolaje o despegue de la Escuela”.
15 Miller, J.-A. “Cinco variaciones sobre el tema de “La elaboración provocada”.
16 Lacan, J. “Decolaje o despegue de la Escuela”.
17 Lacan, J. “El Señor A”: https://www.wapol.org/es/las_escuelas/TemplateArticulo.asp?intTipoPagina=4&intEdicion=1&intIdiomaPublicacion=1&intArticulo=160&intIdiomaArticulo=1&intPublicacion=10
18 Lacan, J. “Acto de fundación”, p. 248.